martes, 13 de diciembre de 2011
SERVICIO ULTIMO CAPITULO
SERVICIO ULTIMO CAPÍTULO
¿Cree que alguna de sus intervenciones ha sido bastante mala?
No se preocupe; no se valora un detalle concreto, sino la actitud
del candidato a lo largo de toda la dinámica.
¿Y si algo de lo que Ud. dice provoca una expresión de disgusto
en la persona que dirige la dinámica? Tampoco hay razones
para sufrir. Algunos dinamizadores fingen no gustarle lo
que dicen los candidatos para ver cómo reaccionan.
En realidad, la dinámica no es exactamente una prueba que
superar, sino una manera más de evaluar la personalidad y las
capacidades de alguien. No se trata de ganar un empleo como
si fuera la lotería, sino de encontrar aquel puesto de trabajo que
encaja con tu manera de ser.
TESTS DE PERSONALIDAD:
• ¿QUÉ NOS DICEN?
No son exámenes que se pueden aprobar o suspender. Son
pruebas que tratan de develar los rasgos principales de nuestra
personalidad. Y ésta no es, ni buena ni mala. Tienen un objetivo,
pero éste no es saber cómo somos en nuestra vida privada,
sino determinar hasta qué punto nuestro carácter se adecua a
un puesto de trabajo concreto y tratar de predecir nuestra conducta
en el ámbito laboral.
• ¿QUÉ MIDEN?
Existen dos tipos de tests: los psicométricos y los proyectivos.
Los primeros dan resultados numéricos que luego debe interpretar
el técnico de selección; los proyectivos, en cambio, se
basan únicamente en la interpretación del profesional, que ha
de ser un psicólogo. El test proyectivo más popular es el de Roschach,
aquel en el que la persona debe decir qué ve en una serie
de manchas y figuras dibujadas sobre una cartulina.
En el mundo de los recursos humanos y la selección de personal,
los más habituales son los tests psicométricos, series interminables
de preguntas con una redacción siempre similar:
algunos ejemplos habituales son las afirmaciones con respuesta
de “verdadero o falso” ("Cuando sé lo que el grupo tiene que
hacer, me gusta dar las órdenes") y las frases incompletas con
respuestas variadas ("Estoy interesado en: a) buscar un significado
personal a la vida, b) asegurarme un trabajo con un buen
sueldo").
Históricamente, el rey de estos tests ha sido siempre el estadounidense
16 PF, que mide dieciséis rasgos concretos de personalidad:
dominación, atención a las normas, autosuficiencia,
perfeccionismo… Rasgos que, a su vez, se engloban en cinco
grandes categorías. Aunque hay diversas denominaciones, básicamente
son las siguientes:
Extraversión o energía: aquí se incluyen la cordialidad, la dominación,
la actividad, la sociabilidad… Según los expertos, indica
una visión confiada y entusiasta de la vida, sobre todo en
las relaciones interpersonales. Es especialmente relevante en
puestos comerciales o directivos.
Afabilidad o amabilidad: los rasgos que incluye son confianza,
franqueza, altruismo… Importante para predecir la capacidad
personal de la empatía, de comprender sus preocupaciones.
Tesón o responsabilidad: referido a la precisión, la autodisciplina,
el orden, la perseverancia… Para muchos profesionales
de los recursos humanos, es uno de los factores que predicen
con más fiabilidad un buen rendimiento laboral.
Apertura mental: a la cultura, a las nuevas ideas y experiencias,
a los sentimientos… Sugiere capacidad de aprendizaje y de
adaptación al cambio, algo muy importante hoy día en el mundo
de la empresa.
Estabilidad emocional: indica la mayor o menor tendencia a
la ansiedad, la depresión, la hostilidad o la irritabilidad. La teoría
de las cinco grandes dimensiones de la personalidad está
tan asumida que otro de los tests más utilizados en selección
de personal lleva por nombre Big Five Questionnaire. Se desarrolló
originalmente en Italia y mide más o menos los mismos
factores que el 16 PF.
• ¿CÓMO AFRONTARLOS?
Tanto los técnicos de recursos humanos como los psicólogos
que trabajan en el ámbito clínico coinciden en que los tests son
fiables, pero no infalibles. Revelan con bastante exactitud la
personalidad y predicen en gran medida la conducta en el puesto
de trabajo. Entre otras cosas, porque los tests no surgen de
la nada. Están validados científicamente y sus resultados se comparan con la media de la población estudiados en cada caso (edad, sexo, categoría profesional…).
Muchas personas creen que se puede engañar en las pruebas
de personalidad, pero no es fácil, ni recomendable. El seleccionador
lo va a detectar y aunque asuma como normal una cierta
voluntad de agradar, valorará más a un candidato que se aleja
un poco del perfil ideal que a otro que no le ha dicho ni una sola
verdad.
Lo mejor, en definitiva, es contestar con la mayor sinceridad
posible. Sobre todo, porque es muy difícil saber qué se valora
más para cada puesto (no todo es tan sencillo como “comercial
= extravertido”; “contable = reservado”). Y porque todos los
expertos en selección, todos, tienen muy claro que el test de
personalidad es sólo un complemento a la prueba realmente
fundamental: la entrevista en profundidad.
Por último, sepan que el servicio fundamentalmente es siempre
POR UNO Y PARA LOS DEMÁS.
De ese modo, estarán gozando profundamente de la experiencia de dar.
El Servicio es producto de lo que Recibo.
Y Recibo lo que Acepto con Libertad y Gracia.
miércoles, 7 de diciembre de 2011
SERVICIO 2
EL VICIO DE SER
En la mitología griega, Ícaro (en griego antiguo Ikaros) es hijo
del arquitecto Dédalo, constructor del laberinto de Creta, y de
una esclava. Fue encarcelado junto a él en una torre de Creta
por el rey de la isla, Minos.
“Dédalo consiguió escapar de su prisión, pero no podía abandonar
la isla por mar, ya que el rey mantenía una estrecha vigilancia
sobre todos los veleros, y no permitía que ninguno navegase
sin ser cuidadosamente registrado. Dado que Minos controlaba
la tierra y el mar, Dédalo se puso a trabajar para fabricar
alas para él y su joven hijo Ícaro.
Enlazó plumas entre sí empezando por las más pequeñas y
añadiendo otras cada vez más largas, para formar así una superficie
mayor. Aseguró las más grandes con hilo y las más pequeñas
con cera, y le dio al conjunto la suave curvatura de las
alas de un pájaro. Ícaro, su hijo, observaba a su padre y a veces corría a recoger
del suelo las plumas que el viento se había llevado y tomando
cera la trabajaba con sus dedos, entorpeciendo con sus juegos
la labor de su padre.
Cuando al fin terminó el trabajo, Dédalo batió sus alas y se
halló subiendo y suspendido en el aire. Equipó entonces a su hijo
de la misma manera y le enseñó cómo volar. Cuando ambos
estuvieron preparados para volar, Dédalo advirtió a Ícaro que no
volase demasiado alto porque el calor del sol derretiría la cera,
ni demasiado bajo porque la espuma del mar mojaría las alas y
no podría volar. Entonces padre e hijo echaron a volar.
Pasaron Samos, Delos y Lebintos, y entonces el muchacho
comenzó a ascender como si quisiese llegar al paraíso. El ardiente
sol ablandó la cera que mantenía unidas las plumas y éstas
se despegaron. Ícaro agitó sus brazos, pero no quedaban
suficientes plumas para sostenerlo en el aire y cayó al mar. Su
padre lloró y lamentando amargamente sus artes, llamó a la tierra
cercana al lugar del mar en el que Ícaro había caído, Icaria,
en su memoria. Dédalo llegó sano y salvo a Sicilia bajo el cuidado
del rey Cócalo, donde construyó un templo a Apolo en el que
colgó sus alas como ofrenda al dios.”
Mantener el justo medio, la virtud, es en realidad una tarea
sencilla. Sólo hay que recordarse continuamente que uno está
presente y ofrece un servicio para uno, que sirve a otro. El otro,
cliente, se dispone a recibirlo y nos paga por ello. Recibimos un
beneficio, una utilidad como intercambio. No le estamos haciendo
un favor, ni nos está haciendo un favor al recibirlo.
Es un trabajo que nos produce placer porque es lo que queremos
hacer. El MP es obtener la mayor utilidad y de esto se trata.
Todas las utilidades tangibles o intangibles contribuyen a
obtener la mayor utilidad, DEBE SER ASI.
“Utilidad” es lo mismo que “bondad”. No olvidar, que para
ser bueno con otros hay que ser bueno con uno mismo primero.
Esto promueve que la calidad percibida por el cliente aumente.
Sólo quien se respeta puede brindar respeto. Respete su buen
nombre, su marca y aumentará la calidad percibida de su producto.
La calidad percibida de lo que Ud. hace es como condición,
uno de los pilares de su servicio. Es como lo ven los demás, y
esto, si uno está atento, le puede proporcionar ideas concretas
que lo acerquen a estar atento, no sólo a lo que Ud. desea sino
al servicio que puede proporcionar como proveedor de sí mismo,
de sus clientes y de su entorno.
Estar atento es una virtud que lo sitúa en el presente, lo ubica,
lo ocupa y entonces puede aprovechar todas las oportunidades,
eligiendo cuál de ellas cumple con sus expectativas a través
de la experiencia, lo que es lo mismo que decir “a través de
los sentidos”.
El campo de probabilidades es el terreno donde se dinamiza
el Supraconsciente y se aliviana el inconsciente.
Elegí la leyenda de Ícaro porque el secreto es movernos en el
campo de las probabilidades. El campo de probabilidades es el
que ocupamos nosotros mismos. No está fuera de nosotros, está
dentro nuestro y es de naturaleza infinita. Es de una sabiduría
superior y nos acerca no sólo a quienes deseamos ser sino a
quienes de verdad somos por naturaleza.
En este campo de probabilidades, el otro o lo otro, son participantes
de nuestra propia realidad, representan afuera una
parte interna de nuestro ser. En este espacio elijo más allá de
mi pasado y sin proyectar al futuro, porque habito en el espacio
presente. El tiempo de reloj y calendario no existen. Y esta sabiduría
interna contribuye a la creación constante de mi paraíso
interno.
La realidad es el espacio donde yo soy el rey o la reina y está
de la piel para adentro. Todo lo demás existe a modo de reflejo
de mi existencia. Soy responsable de lo que intuyo, pienso siento
y hago. Siempre soy capaz de darme una respuesta afirmativa
y positiva a lo mejor de mi, YO MISMO. Trabajo por mí para el
otro (o lo otro).
Cada vez que contribuyo lo estoy haciendo por mí mismo para
todos.
Hemos estado haciendo tanto esfuerzo para que se note lo
que hacemos que no estamos prestando verdadera atención a
lo que estamos haciendo en realidad.
Ser capaz de compartir con otros es parte del placer de ser.
Es un círculo virtuoso que nos hace mejores y no pretende cambiar
al mundo… lo cambia… ¡de hecho!
Compartir es el más preciado de los deseos, nos pone en el
lugar del gozo. Fuera del juego del placer y el dolor.
Recuerdo la frase… “El reino de Dios esta dentro tuyo y todo
alrededor tuyo no edificios de piedra y madera. Rompe un pedazo
de madera y ahí estoy, levanta una piedra y me encontrarás.
Tomado de los libros apócrifos encontrados en el mar muerto,
de un texto atribuido a palabras de Jesús de Nazareth”.
Cuando uno de verdad se conecta con su propio paraíso, no
existe espacio para el enojo, el daño o la defensa de nada. No
existe espacio para el orgullo ni el egoísmo. Porque uno de verdad
sabe que lo que es de uno, vuelve a uno. Que no hay nada
para perder y todo para ganar. En este espacio que ocupo, se
hace posible todo lo que es. Y no requiero de ningún esfuerzo
porque todo es expresión de mi ser. Y mi ser verdadero es bello
y perfecto. Nadie me puede lastimar, ni puedo lastimar a nadie
que ya no se haya lastimado a sí mismo.
Y sin embargo, soy absolutamente responsable de todo cuanto
existe dentro mío y alrededor mío. Todo me pertenece y le
pertenezco a todo. Todos tenemos la misma esencia. Todos tenemos
los mismos deseos, y éstos se expresan abundantemente
en mi universo, para mi evolución y la evolución de todos.
Empiezo a percibir al Universo en su verdadera dimensión, de
lo invisiblemente pequeño a lo infinito, ambos creciendo en espiral
ascendente en el “no tiempo”. Éste es el comienzo de lo
desconocido, el paso hacia lo increíble: Yo mismo.
Tanto para aquellos que quieran desarrollar una actividad
grupal, como para aquellos que quieran obtener una entrevista
exitosa, debajo explica la dinámica grupal, y cuál es el modo de
encarar una entrevista.
La dinámica de grupo se aplica en muchos campos, desde la
creación publicitaria hasta los tratamientos terapéuticos. En recursos
humanos, se utiliza preferentemente en la búsqueda de
directivos, aunque no resulta nada extraño encontrarla en cualquier
tipo de selección. Es que ejercicios de este tipo permiten
descubrir muchas características de las personas cuando entran
en contacto con un grupo. Así se ve si un candidato trabaja bien
en equipo, si coopera, si escucha a los demás, si es creativo, si
tiene “madera de líder”...
Lo habitual es que la dinámica de grupos se combine con
otras pruebas, como tests o entrevistas individuales. No hay resultados
más decisivos que otros, pues todo depende de lo que se vaya viendo a lo largo del proceso, pero, por regla general, la dinámica suele tener más importancia que la cantidad de aciertos en el examen psicotécnico.
¿CÓMO ACTUAR?
En las entrevistas de selección, hay varias preguntas típicas
que surgen casi siempre, cuyas respuestas se pueden preparar
tranquilamente en casa.
En las dinámicas no ocurre esto: cada una funciona de manera
diferente. Quizás, por casualidad, el juego o situación propuesta
resulte familiar, pero es imposible prever las reacciones
de los compañeros y lo que va a suceder. Así que no hay que elaborar
estrategias previas. Lo mejor es mostrarse tal cual uno es.
No intentar averiguar lo que quiere el seleccionador, porque
difícilmente se adivinará. Con frecuencia, las dinámicas se usan
para detectar personas con capacidad de liderazgo, pero también
pueden aplicarse, por ejemplo, en la búsqueda de creativos
o de profesionales con una clara orientación al cliente.
Ser espontáneo. Sentirse a gusto y disfrutar del juego en la
medida de lo posible. Si se intenta convertirse en el líder del
grupo sin tener cualidades para ello, es probable que se acabe
dando una imagen negativa. Por supuesto, hay que participar y
hablar, pero esto no significa dar la nota, ni tomar la iniciativa
necesariamente. Si siente que "hay" que romper el hielo y conducir
la conversación, adelante. Si prefiere reflexionar y mantenerse
a la expectativa, hacerlo. La clave está en ser uno mismo.
Mantener en todo momento una actitud de respeto hacia los
demás. Escuchar e invitar a participar, pero no temer discrepar
de otras opiniones: si sabe lo que dice (y la seguridad en uno
mismo es un rasgo muy apreciado), defienda razones educadamente
e intente buscar un consenso. La confrontación abierta
no es buena, pero tampoco suma puntos quien evita el conflicto
con el grupo a toda costa.
martes, 6 de diciembre de 2011
SERVICIO 1
El vicio de ser…
Producto es cualquier cosa que sea posible ofrecer a un mercado
para su atención, su adquisición, su empleo o su consumo
y que podría satisfacer un deseo.
Producto = tangible (se puede tocar)
Servicio = intangible (no se puede tocar)
El servicio tiene que comportarse como un producto de especialidad,
con preferencia y lealtad, con una marca poderosa, un
esfuerzo especial de compra, poca comparación, nivel bajo de
sensibilidad al precio, distribución exclusiva, promoción y publicidad
orientadas al mercado dirigido.
¿Qué significa esto en Marketing Personal?
Ud. debe ser especial, ofrecer un servicio con preferencia y
lealtad. Ud. es una marca poderosa identificable con las virtudes
que lo hacen único, El precio que tiene su servicio es especial,
no se puede comparar con el de otro/s. Su precio es el valor
que Ud. ha elegido por conveniencia, se distribuye exclusivamente
en lo que a Ud. le gusta y se orienta al mercado que le
apetece para su felicidad y la felicidad que contagia a las personas
que le rodean.
Es bueno tener en claro algunos puntos que le ayudarán en la
venta de su producto, al ofrecer lo que Ud. hace como servicio.
¿Cuál es su marca? Su frase de refuerzo.
Ejemplo:
“Shampoo Z. Nunca dejes de brillar”.
“Gaseosa X. La Alegría Transforma”.
Contéstese, Ud. está brindando su propio servicio.
El servicio tiene que ver con tres conceptos fundamentales:
SERVICIO FUNDAMENTAL: El oficio principal que Ud. tiene.
SERVICIO REAL
Este concepto incluye la calidad del servicio que brinda sumado
todos los atributos de su servicio que lo hacen hacer las
cosas como Ud. cree que deben hacerse, lo que lo diferencia de
otro. Lo que lo hace único, incluye su marca, su tarjeta, su modo
de presentarse.
SERVICIO AUMENTADO
Esta parte se refiere a todos los servicios post-venta, que Ud.
puede ofrecer. Las garantías de un trabajo bien hecho. Los roles
diferentes de percepción de lo que Ud. ofrece, no son Ud.
pero lo ayudan a la hora de orientar su actividad. Sus servicios
tienen como atributos, en principio LA CALIDAD.
La calidad incluye la habilidad para desempeñar sus funciones,
su durabilidad, confiabilidad, precisión, facilidad de operación
y reparación. Hace rato que los productos no se venden si
no están acompañados de un servicio adicional que tiene que
ver más con la satisfacción de un deseo que una necesidad. De
manera que hace rato que no compramos agua mineral para saciar
la sed, sino para incorporar esas vitaminas y sales adicionales
que nos proporcionan hidratación muscular y nos dan
más rendimiento en el ejercicio. Por lo que Ud. no satisfaría sólo
la necesidad de un empleador, sino el deseo de que su incorporación
signifique un progreso para la tarea que desempeñe.
Lo mismo pasa en el caso de ofrecer un servicio. Ud. no sólo
ofrece masajes, vende bienestar, relajación, paz y buena energía.
Si Ud. vende un servicio recuerde que para venderlo debe hacerlo
tangible de algún modo, de manera que sus presentaciones
escritas, con sus limitaciones, lo deben acercar a la prueba
y el consumo de lo que ofrece. Entonces, cuide su presentación,
el buen gusto y la profesionalidad. Estos atributos pueden mostrarse
con mucha más precisión en la caligrafía, el diseño, las
imágenes y hasta en la calidad del papel. No sea mezquino
cuando se presente, ni tan generoso, exponiéndose así a un fracaso.
Haga poco y pruebe hasta encontrar cuál es su mejor modo
de llegar al público que desea. Haga una inversión y denomínelo
de esa manera, pues eso es. Invierta en su apariencia tanto
como en sus folletos, pues es importante que Ud. se sienta
como es. Su carta de presentación puede ser una carpeta, un video, un folleto, un mail o todo eso junto. Prepárelo a consciencia, y por favor, no espere resultados positivos inmediatos. Si los hubiere mejor, siga trabajando en ellos. Si no los hubiere, cambie y transforme, sea creativo. Use palabras que lo ayuden
a encontrarse con Ud. mismo primero y que lo acerquen cada
vez más a quien es. No se transforme para otro. Use las virtudes
que tiene y elija cuales le serán, si quiere, más convenientes para
vender lo que ofrece, y pruebe sabiendo que va a encontrar...
Deje de buscar, encuentre.
Es muy importante en este punto no confundir conceptos, el
servicio que acompaña su producto o su servicio es lo que lo
hace diferente, por lo que un servicio NO ES UN FAVOR.
Por los servicios ofrecidos hay que obtener un beneficio, puede que éste
sea visible o no. Puede cobrar dinero, hacerlo a modo de
trueque u obtener lealtad, amor, gracia y placer de compartir.
Si se apartase de este concepto, lo suyo no sería un servicio y se
desvirtuaría, se corrompería la motivación principal de brindar
un servicio.
sábado, 3 de diciembre de 2011
COOPERACIÓN 4
El chef es Ud. y debe estar capacitado, o sea, ser capaz de
probar sus propias recetas.
Si a Ud. no le gustan, deje de hacerlo.
De hecho, los mejores chefs son capaces de ampliar sus paladares,
convirtiéndose en sus primeros comensales, antes que
los den a probar a sus clientes.
Con la vida es importante hacer lo mismo.
Podemos probar cualquier cosa nueva. Quizás si nos ofrecen
una milanesa de berenjenas, podamos comerla con gusto.
A veces podemos probar nuevamente para ver si experimentamos
la virtud que no pude encarnar de otra manera, en otra presentación,
con otra forma de cocinarla o de una variedad diferente,
podamos descubrir de este modo que en ciertas condiciones
sí, nos gusta, siempre hecho de manera libre sin imponer, ni exigir,
cuando surja por medio de la inspiración, cuando el ambiente
nos afecte de modo positivo y nos animemos a probar.
No siempre que se vuelva a encontrar con el novio que lo dejó
o su ex vamos a sentir rechazo y recordar continuamente el
dolor que sentimos. Podemos permitirnos experimentar al otro
como la persona de la que alguna vez estuvimos enamorados, o
que todavía amamos de alguna manera. Y aceptarla, por ejemplo
como la madre de sus hijos, sin que los afecte una y otra vez
una situación que ocurrió en el pasado y no tiene nada que ver
con el presente.
El presente es como una pileta en la que sólo podemos nadar
si nos tiramos de cabeza cuando tenemos miedo. El miedo no
nos permite relajarnos ni disfrutar. Es como una mala broma jugada
por alguien que nos tira a la pileta sin pensar si sabemos
nadar.
Al estar en el lugar del chef o del mago, existe la posibilidad
de probar el agua con los dedos. Bajar por la escalera en lo bajo
e ir probando diferentes estilos para flotar cómodos.
Nos damos cuenta que la receta de otros puede proporcionar
pistas, inspirar, guiar, acompañar, pero la experiencia es absolutamente
individual. Y lo bueno es que la historia recién comienza,
no importa el punto en que comience, porque todo está
dado de manera perfecta. Animarse y hacerlo es el punto de partida.
Las metas de todos son las mismas, pero no tienen ninguna relación
con las cosas obtenidas, sino con las virtudes y las acciones que
experimentamos.
Y la cooperación es el combustible que permite ser
quien se quiere ser.
Verlo como un camino es a mero efecto de su comprensión.
Poner objetivos es a mero hecho de entendimiento y ante todo,
de paciencia. Alcanzar metas es cruzar otra puerta que nos deja
en un nuevo salón de distribución de la próxima puerta que
queremos cruzar. El inconsciente puede ser tan destructivo como
creativo, hay que darle respuestas racionales que lleven a la
aceptación de nuestros sentimientos al respecto. Para eso, para
aprovechar nuestro poder inconsciente, es necesaria la comprensión
que tiene sustento en el propio amor, en vez del miedo
al resultado.
La comprensión y la aceptación son el primer paso para cambiar
un pensamiento negativo en uno positivo que nos acerque
a lo que deseamos.
Los deseos nos acompañan hasta el último día, porque son parte
gozosa de la experiencia. Y trabajar en lo que deseamos, nos da
libertad y prosperidad. La cooperación nos mantiene en un centro
virtuoso y elevado de comprensión del sentido de la vida.
Creemos que no tenemos que cooperar porque deseamos las
mismas cosas. Eso quisieron que creamos, porque pensaron
que así irían en contra de las confrontaciones y de la guerra.
El camino del amor propone algo distinto. Propone ponernos
en contacto con los deseos a favor de la paz, sabiendo que los
deseos siempre están satisfechos en el ahora.
De esta manera, la cooperación no engendra competencia.
Porque sabemos que el propósito del negocio es el mismo para
todos. La cooperación permite nacer a la individualidad que hace
de nuestro negocio una expresión única de uno mismo, porque
es nuestro y tiene las virtudes que nosotros le proveemos.
Por lo tanto, NO DISTRAERSE MIRANDO A LA COMPETENCIA,
usarla sabiamente. Ud. es dueño de una parte de la verdad, el
otro es dueño de otra parte distinta. Usar esa información no
significa copiar, sino estimular la creatividad para conocer más
de la verdad.
Cree (del verbo crear) con lo que descubra a partir de lo que
Ud. y muchos otros mal llaman “competencia”. Los otros tienen
otras visiones de lo mismo.
Esté seguro que no le va a importar ser el primero en una lista
ajena. Sea el número 1 de la suya, ocúpese de hacer su negocio
rentable y con utilidades. Su posición es única y ningún negocio
es como el suyo. Cuando desee el negocio de los demás,
pregúntese ¿dónde estoy poniendo mi deseo?
Con honestidad, ¿deseo ser como otro?
La verdad es que nadie desea ser otro, uno quiere ser feliz como es.
REQUIERE DE VALENTÍA
ANIMARSE A BRILLAR
VIVIR EN EL AHORA
jueves, 1 de diciembre de 2011
COOPERACIÓN 3
La gran pregunta vuelve a hacerse esta vez desde el lugar de
cooperar para sacar brillo a lo que ya existe adentro. Seguro
que si uno a estas alturas hizo un descubrimiento, habrá notado
también la resistencia a creer en uno mismo y el rechazo a
hacerlo real.
Aquí funciona la magia, la resonancia armónica, para ponernos
a nuestro favor. Nuestro razonamiento se encuentra colapsado
y nuestros sentimientos están reprimidos por las obligaciones
que nos hemos impuesto, por lo que a la hora de descubrir,
nos encontramos pensando y sintiendo en nuestra contra.
No es agradable de ver aquello que descubro en primera instancia,
porque me ha servido como defensa y se ha basado en
el miedo en vez del amor.
Hay que ser amoroso con uno mismo, tenerse paciencia. Gran
parte de las veces descubrimos aspectos negativos de nuestro
ser, adquiridos por condicionamientos culturales, familiares o
sociales. Cuando los observamos junto al ser real, al verdadero
yo, brillante y valiente, tenemos la tendencia a sentirnos culpables,
y no permitimos la verdadera reconciliación. Nos cuesta
perdonarnos, dejar ir el error para corregir. Para quedarnos con
el espacio que por ahora guarda la condición de vacío y precede
a la promesa de espacio lleno con lo que más nos guste, provocando,
creando, estimulando magia.
Estar en contacto con nuestro deseo es dejarlo ir como un pedido
que uno sabe que llegará en el momento perfecto, del modo
perfecto y con nuestra asistencia verdadera.
Sin necesitar morirme de sed para gozar de un vaso de agua.
Satisfago un deseo
Deseo agua para satisfacer mi sed.
Suena sencillo, simple. No lo es, son generaciones tras generaciones
de ADN tratando de sobrevivir, en vez de vivir. Distrayéndonos
del milagro de la vida, fuente de amor y atrayéndonos
hacia urgencias innecesarias nacidas en el miedo. Creer es ser
el mago.
¿Qué desea ser para creer?
Un hada, un ángel, un mago. Pues use algo más que la imaginación,
cree un mundo para Ud. Piedras mágicas, meditación,
varitas, sahumerios, sales, viajes, pero crea en Ud., pues en Ud.
están todas las respuestas que está buscando. Pregúntese
más…
¿Qué desea hacer para creer?
¿Qué elemento lo ayudaría a creer?
¿Qué rito haría para honrar su deseo?
¿Cuántas veces a la semana?
¿Para qué?
¿Cómo cumplir las promesas que Ud. se hace?
Usaré un ejemplo más sencillo. Imagínese como un chef en
su vida.
Por un momento imagine qué virtudes pondría para degustar
su propia vida, mientras prepara el plato que va a disfrutar. En
un recipiente ubique todas las virtudes con las que cuenta en su
despensa (Ud. mismo):
Paciencia
Poder
Expectativa
Educación
Transformación
Claridad
Libertad
Espontaneidad
Orden
Positividad
Alegría
Flexibilidad
Confianza
Salud
Entrega
Entusiasmo
Nacimiento
Integridad
Perfección
Bendición
Compañía
Sabiduría
Ternura
Comunicación
Síntesis
Fuerza
Amor
Paz
Luz
Propósito
Responsabilidad
Curación
Compasión
Desapego
Inspiración
Purificación
Unión
Simplicidad
Deleite
Belleza
Comunión
Fraternidad
Gracia
Honestidad
Valentía
Verdad
Fe
Creatividad
Disponibilidad
Humor
Serenidad
Comprensión
Aventura
Afecto
Perdón
Abundancia
Obediencia
Gratitud
Cooperación
Equilibrio
Armonía
Bondad
Apertura
Tranquilidad
Esperanza
Victoria
Gloria
Justicia
Redención
Discernimiento
Haga una lista con lo que cuenta, y haga otra con las que cree
que tiene que adquirir.
Como con los alimentos, uno a veces tiene una virtud que
otra que pelar, sacarle la cáscara. Otras que lavar, otras que cortar
en fina juliana, y otras que requieren de una preparación
previa, como los pickles.
Imagine una actividad para cada una de las virtudes que posee,
por ejemplo:
Paciencia: ¿Cómo sacarle brillo?
Sólo haré una cosa a la vez el día de hoy y disfrutaré del tiempo
que en ella invierta.
Amor: ¿Cómo quitar la cáscara?
Sólo por hoy escucharé, hablaré y pensaré palabras amorosas.
Libertad: ¿Cómo lavar esta virtud?
Sólo por hoy soy libre de sentir lo que siento.
Estos fueron algunos ejemplos de las virtudes que guardamos
en la despensa.
Ahora, ¿dónde consigo las virtudes que tengo que comprar
para mi receta de felicidad? En el propio supermercado imaginario,
abierto las 24 horas del día. Cada vez que se quiera agregar
una virtud a la receta de la felicidad, hay que buscar primero
inspiración, luego enfocar la mirada en ello, poner atención
con la intención de encontrar y con paciencia buscar de a una la
virtud que se quiere encarnar.
Luego volver al paso 1. Pelar, sacar brillo, cortar en rebanadas…
Y mezclar con el resto de las virtudes en casa.
Revisar la lista para saber si los ingredientes en stock son suficientes.
Podría ser que alguna virtud no sea suficiente de la
despensa y tenga que adquirir algo más, pero la atención en este
momento se vuelve importante. Según como se mezclen los
ingredientes, la receta será más o menos sabrosa.
miércoles, 30 de noviembre de 2011
COOPERACIÓN 2
OBJETIVOS
Los objetivos son pequeñas metas que nos ponemos como
medio para enfocar resultados. De manera tal que cada objetivo
logrado se constituye en un paso que me acerca a la meta.
Con objetividad observo los resultados de una acción que se
emprende sin juicio, sabiendo que se descubre en libertad algo
de uno mismo en el proceso. El objetivo no se ve cumplido por
un resultado positivo, de hecho se ve cumplido por haber hecho
la acción que llevará a la corrección para obtener el resultado
que uno desea. De hecho, haber realizado algo que uno se ha
propuesto, desde ya es positivo, más allá del resultado.
Es el fin al que se dirigen nuestras acciones y deseos. Tiene
que ver con los logros. Un auto no es una meta. La paz, el amor,
la libertad son metas.
La meta es el deseo y se hace realidad a través del cumplimiento
del propósito de vida como individuo en este mundo.
En la cooperación, la compañía de otros puede comportarse
como tal o representar en el afuera al enemigo que llevamos
dentro.
Si nosotros cooperamos con otros, es desde nuestra más profunda
libertad y sintiéndonos agradecidos por poder dar. Lo
mismo para los que cooperan con nosotros, a lo que estaremos
dispuestos a agradecer por haber recibido de su parte, pero en
ninguno de los sentidos estamos en deuda, ni nos deben.
La cooperación bien entendida la lleva adelante un personaje
interno que también existe dentro nuestro: EL MAGO.
El mago es el maestro de la alquimia. La alquimia es transformación.
La búsqueda de la perfección se inicia a través de la alquimia.
Somos el mundo. Cuando nos transformemos, el mundo
en el cual vivimos también se transformará. Las metas de la
búsqueda –heroísmo, esperanza, gracia y amor– son el legado
de lo eterno. Para reclutar la ayuda del mago, debemos ser fuertes
en la verdad, no obstinados en nuestros juicios.
Lo que significa lo mismo que ser valientes, darnos el valor
que tenemos. Es muy fácil salir a ser valientes para otros u otra
causa que no sea la propia. No es tan sencillo hacerlo para nosotros
mismos, ¿por qué? Porque nos enseñaron a salirnos del
espacio que ocupamos, haciendo que ocupemos el espacio de
los demás en orden de sobrevivir.
Sobrevivir implica al otro, a lo de afuera, matar o morir, no
nos deja salida ni opción.
Vivir implica como condición sin equanon, RESPONSABILIDAD,
la capacidad de darme una respuesta amorosa, afirmativa
y positiva. ELEGIR.
La Felicidad
no tiene precio,
pero tiene costo.
La condición del mago nos cambia primero a nosotros, luego
como corresponde nos impulsa naturalmente, nos inspira a
cambiar lo que nos rodea, sin nuestra intervención directa, sólo
funcionando para nosotros mismos a favor de las cosas que
queremos, en vez de ir en contra de las cosas que no queremos.
Todo lo demás es atraído armónicamente con magnetismo, si
así lo quieren, a nuestro favor.
La cooperación tiene que ver con la inspiración de uno con
uno mismo a hacer a favor de uno. La creatividad no es espontánea,
requiere inspiración. La inspiración nace del descubrimiento
de las propias virtudes y de las que creemos que debemos
adquirir.
¿Qué puedo usar para inspirarme?
martes, 29 de noviembre de 2011
COOPERACIÓN 1
Compartir es el modo más satisfactorio de lograr proyectos,
fructifica y multiplica el resultado, por lo tanto, la felicidad.
Tanto la planificación como las metas contribuyen a dar un
mapa de los deseos que se guardan en nuestro interior, que llevan
directo al auto-conocimiento. La meta y el objetivo no son
distintos, uno no existe sin el otro. Planificar nos da un espacio
para soñar con lo que deseamos.
Si lo hacemos desde la perspectiva que les propongo, el objetivo
y la meta son lo mismo y existe antes de haberla emprendido.
Nuestro trabajo consiste en descubrirla.
Si logramos permanecer presentes por términos más prolongados
de tiempo, descubriremos las flechas que nos acercan, o
los “angelitos” que nos señalan el camino, con la misma disposición
de una publicidad.
No se apresuren, se pierden de disfrutar el paisaje. No se
apenen, ningún resultado está fuera de lo previsto. Vivan la vida
con la sensación de haber obtenido todo lo que desean. El
sabor de la vida está hecho de la satisfacción de los deseos y el
deleite es saber que lo que no depende de uno, será.
Como el arquero que luego de soltar la flecha, sabe con certeza
que dará en el blanco. No fuercen, no se esfuercen.
Trabajen y gocen del trabajo que realizan ahora, tienen todo
lo que necesitan, es más, todo lo que desean está a su alrededor
para que lo tomen. Estén atentos para tomarlo cuando se
presente.
Cooperar significa trabajar en la realización, la hechura de su
propio paraíso y del paraíso de todos los seres que nos acompañan.
Cooperar, es co-operar con la Naturaleza y con los hombres
en la creación del paraíso. Somos todos responsables de todo.
Dejemos de sentirnos culpables y castigarnos alejándonos de lo
que deseamos para ser responsables del paraíso que queremos
crear.
Empecemos a darnos cuenta, que a pesar de estar funcionando
en un mundo dual, podemos pararnos en un lugar donde el
balanceo no se hace tan pronunciado, un mejor lugar en donde
nos proponemos hacer lo bueno para nosotros mismos, que es
lo mismo que lo bueno para todos.
La cooperación es el modo de unir lo que hemos separado para
nuestra practicidad y la ejecución de objetivos.
A veces esto significa decir “No” a cosas que en este momento
de la vida se vuelven inaceptables, para empezar a aceptar lo
que nos es dado por merecimiento a nuestro amor por nosotros
mismos.
Si en esencia somos amor y luz, ¿por qué no actuar desde este
lugar para iluminar lo que nos rodea? De hecho, la oscuridad
no tiene definición en sí misma, es ausencia de luz. Cualquier
llama disponible (la de un fósforo), es útil. Nosotros tenemos
nuestra propia luz interna que hace que la oscuridad deje de
existir.
Hacer realidad nuestro paraíso significa cooperar con nuestro
yo superior, esencia divina, con Dios (para los que creen) a favor
nuestro, y dejar de castigarnos para hacernos responsables de
lo que somos y de lo que nos rodea. Hacernos responsables, por
definición es nuestra capacidad para darnos una respuesta afirmativa
y positiva. Para darnos permiso para SER sin condicionamientos
familiares, culturales, sociales, religiosos.
SER LIBRES sin juicio ni prejuicio.
La administración, a efectos de pensar la organización, diferencia
objetivos y metas. Quizás para pensar en su mapa, en su
planificación pueda también serle útil hacerlo de este modo,
acercando diferencias.
jueves, 24 de noviembre de 2011
CONVENIENCIA 3
LA CADENA DE VALOR
La cadena de valor categoriza las actividades que producen
valor añadido. Se dividen en dos tipos de actividades:
Las actividades primarias, que conforman la creación física
de la vida que deseo, las actividades relacionadas con el trabajo que uso para obtener dinero para vivir, que como condición
sin igual me tiene que gustar, y los beneficios que obtengo de
ello.
Se dividen en:
• Lo que me gusta hacer, mi propósito: ¿cómo hago lo que me
gusta hacer?
• ¿Qué necesito para hacer realidad mi deseo?
• ¿Qué precio le pongo a lo que me gusta hacer?
• ¿Cómo doy a conocer mi producto?
• El espacio que le brindo a la creatividad.
Estas actividades son apoyadas por las también denominadas
actividades secundarias, que tienen que ver con los recursos:
• ¿Quiénes pueden colaborar en nuestro proyecto?
• La motivación como fuente de inspiración continua de mis
proyectos.
• Desarrollo, obtención, mejora y gestión de la tecnología a
favor de facilitar los procesos.
• La compra y el abastecimiento de los materiales necesarios
para la producción, la distribución, y la comercialización de los
productos, sueños y proyectos que tengo.
Para cada actividad de valor añadido han de ser identificados
los generadores de costos y valor.
El valor percibido, entonces se vuelve de suma importancia.
Un ejemplo común es el del perfume. Puede ser que la esencia
utilizada para su realización sea de excelente calidad, pero
el cliente sólo le dará valor si el frasco y la caja acompañan el
valor del perfume. Por cierto, los costos de la mayoría de los
perfumes son en un setenta por ciento packaging.
En el caso del MP (Marketing Personal), el producto somos
nosotros. Nuestra imagen debe haber nacido de la percepción y
la observación de nuestra esencia. Y la conveniencia debe jugar
un papel importante. Sabiendo que nuestros clientes compran
lo que quieren y lo que pueden, sólo debo basarme en lo que yo
quiero vender, y prestar atención a las oportunidades de negocio
que se me presenten. Invertir obteniendo un beneficio adecuado
a veces no es fácil, requiere de investigación. El campo
de investigación es el interno y de ahí vendrán los mayores beneficios
traducidos alrededor nuestro.
La negación de la existencia de otros como clientes imposibilita
los negocios.
Vamos a buscar algo real para nosotros. Lo real es lo que nos
hace bien, nos da valor y nos hace sentir verdaderos con nuestros
sentimientos. De hecho no existen personas que hayan sido
felices dependiendo de algún aval externo a ellas mismas.
Por lo que a la hora de encontrar un trabajo, primero hagámoslo
de modo realmente conveniente. Elijamos lo que nos
gusta hacer primero, luego elijamos al menos 10 empresas a las
que consideremos buenas en lo que hacen y en las que nos gustaría
trabajar. Y presenté monos, más allá de si están buscando
empleados o no. Vayamos al encuentro de nuestro trabajo, con
paciencia. Repitamos este proceso, tantas veces como sea necesario
hasta encontrar el trabajo que deseamos por el precio
que deseamos y en las condiciones que deseamos. En el proceso,
por favor sean compasivos con Uds. mismos, LOS TRABAJOS
POR AHORA EXISTEN. Así que no teman, salgan, trabajen y sigan
encontrando trabajos que les gusten, y sigan eligiendo en
libertad, LO QUE LES CONVIENE y les gusta.
Por otra parte, la historia económica está transformándose
día a día, cada vez más en la necesidad de crear trabajos independientes.
Se hace presente la economía globalizada y la tecnología
con menos trabajo en grandes empresas. La gran oportunidad
está en el trabajo independiente, en el desarrollo de las
economías regionales, en vivir donde nos gusta y trabajar de lo
que nos gusta. Hacer que la prosperidad funcione correctamente,
en función a la libertad. Requiere que recordemos y reafirmemos
nuestro valor como individuos para darle valor a lo que
nos rodea.
Alguien me preguntó una vez para qué sirve tener consciencia:
PARA ELEGIR.
No está en cuestión la existencia. Dicen los matemáticos y
los físicos que la vida se abre paso más allá de la voluntad humana.
Está en cuestión la libertad de elegir, que algunos tontos
pusimos en juego. El libre albedrío nace en la conciencia y es sinónimo
de elegir.
En la consciencia las cosas suceden, en vez de que “le” suceda
a la gente. En la consciencia hay PAZ. El camino del amor está
hecho de baldosas de paz. Hay que elegir qué nos afecta y
hasta dónde nos dejamos afectar por lo que está sucediendo.
Me plantearon que el libre albedrío no existe, que ese concepto
es para someter a las masas, a través de la religión o la
política.
Quiero decir que el único lugar donde corrijo de verdad, sin
repetir patrones condicionados por la cultura, la religión o la política,
es la consciencia. La conciencia no nos permite identificarnos
con ninguna parte nuestra, ni con los pensamiento, ni con
los sentimientos, ni con lo que hacemos, ni con el pasado, ni con
el futuro, justamente por eso y en ese lugar, en ese espacio habita
nuestro ser que es donde somos verdaderamente libres.
Si tomáramos decisiones desde ese lugar, nos reconoceríamos
en todo lo que existe, no hay ningún otro, SOMOS todos.
No hay lugar para la competencia, ni el egoísmo, ni para la
amenaza, ni para el amenazado. Somos libres absolutamente
de nosotros, de nuestro cuerpo y de nuestra mente.
Sin embargo, nos habitamos completamente, estamos presentes
más allá de cualquier cosa, somos profundamente compasivos
y comprensivos, porque nos comprendemos y nos tenemos
compasión, sentimos amor por nosotros mismos, y no “necesitamos”
a otro/s para amarnos. En cambio, lo “deseamos”.
La parcela de paraíso está rodeada de las parcelas de paraíso
de todo lo que nos rodea. Deseamos profundamente presentes
a cada uno de los paraísos que nos rodean.
De ahí que el balance, no es cuánto se tenga, cuánto se haga,
cuánto se piense, cuánto se sienta. Somos y simplemente nos
observamos, hacemos silencio y elegimos no sólo cuánto, sino
qué nos afecta y hasta dónde nos dejamos afectar.
A veces nos daremos cuenta que realmente nos está importando
aquello que no nos tendría que importar, y entonces lo
soltamos libremente y en paz, para dejar espacio a lo que de
verdad nos importa a todos.
He aquí el equilibrio y el balance. En este estado somos toda
aceptación de todo lo que la vida tiene para ofrecernos. Por lo
que las virtudes, la bondad, la verdad, la belleza, la paz, la libertad
y el amor se hacen presentes naturalmente, brillan para
llenar la ausencia.
La ausencia de la bondad es la maldad.
• Ausencia de verdad, mentira.
• Ausencia de belleza, fealdad.
• Ausencia de paz, guerra.
• Ausencia de libertad, prisión.
• Ausencia de amor, miedo.
La ausencia de presencia es la soledad. De verdad sólo puedo
estar junto a otro cuando estoy presente, aquí y ahora.
Cuando estoy presente, sólo puedo elegir lo que le conviene
a mi amor.
Y sólo puedo amar a otro cuando me amo. Y el otro sólo puede
amarme cuando se ama.
Me doy cuenta que me amo sólo cuando digo al otro cómo
quiero que me ame...
• Cuando me gusto cómo soy cuando estoy con el otro.
• Cuando los “peros” quedaron atrás y sólo disfruto el momento,
sin proyectar.
• Cuando confío en el otro.
• Cuando creo al decirme que me aman.
• Cuando acepto su presencia (la del otro que es la propia).
• Cuando digo “esto no es aceptable, ni conveniente para mi”.
• Cuando ocupo mi propio espacio, sin invadir, ni dejarme invadir
por otro/s. Ocupar mi espacio es darme valor en todas las
virtudes que tengo.
Me han dicho una y otra vez que es un esfuerzo decir al otro
cuanto cuesta lo que vendemos, o le damos un montón de explicaciones
de por qué cuesta lo que cuesta lo que vendemos.
Nuestro precio está puesto por razones que nosotros ya hemos
dispuesto y costos que hemos calculado, por lo que no hay explicación.
En la oferta cada uno tiene el derecho de cobrar lo que le parece
y el otro tiene el derecho de comprar lo que le parece al
precio que le parece. Cada vez que regateamos con el valor de
nuestro producto y nuestro trabajo estamos regateando también
con nuestra auto-estima. Por eso, no regatee, no se crea
más que el otro y piense o sienta ¨pobrecito¨, porque el pobrecito
está siendo Ud., que por un momento se creyó con más posibilidades
que el otro.
Su ego le está jugando una trampa que le va a salir cara. Diga
“gracias”, cada vez que tenga la oportunidad de dar, sabiendo
que Ud. es beneficiado.
En las relaciones personales ocurre lo mismo, sea agradecido
y sus hijos también serán agradecidos. Cada vez que Ud. se sale
del lugar de padre para hacer de compañero de su propio hijo,
no se está dando su lugar, no se queje después. Cada vez
que le dice a su hijo “no, gracias” cuando corresponde, está
amando. No hay regateos tontos a la hora de su seguridad y felicidad.
Los regateos salen caros. El precio de ser padre es verse
feliz en los rostros felices de los que lo rodean.
MI FELICIDAD ES TU FELICIDAD
En esto su presencia es de absoluta necesidad. Ud. no se
ocupa, cuando se valora en comparación con otro, (se siente
más o menos que otro), de ninguna manera está siendo responsable.
No se asombre después del resultado. Esté presente y
tampoco se asombre del resultado. Esté tranquilo, todo está
dispuesto para su felicidad, sea feliz ahora.
¿Qué le impide ser feliz en este momento? Hágase una y otra
vez la misma pregunta y vuelva a lo que siente. Respóndase honestamente.
La rueda de la abundancia es saber pedir, dar, recibir y agradecer.
Para ser abundante, el equilibrio es lo que Ud. hace cuando
pide un 25%, da un 25%, recibe un 25% y agradece por todo.
Todo está dispuesto para su satisfacción y es perfecto, déjese
llevar.
Siéntase libre e inocente, mire como nuevo todo en su vida.
Todo está para ganar, y lo que se pierde no nos sirve, no nos es
útil. Y si recuerdan, “utilidad” y “bondad” son sinónimos.
La información es la fuente donde nos nutrimos para hacer
realidad una parte de nuestros proyectos personales a nivel
profesional. Me pareció interesante a la hora de informarnos,
hacer una lista de fuentes de información para guiar nuestras
búsquedas, tanto para proyectos personales independientes
como en relación de dependencia.
miércoles, 23 de noviembre de 2011
CONVENIENCIA 2
LA NEGOCIACIÓN
"Es el proceso de lograr aceptación de ideas, propósitos e intereses,
buscando el mejor resultado posible, de tal manera que
todas las partes sean beneficiadas". (Correa y Navarrete, 1997).
Por lo que la competencia es inaceptable, lo único aceptable
es la cooperación. De este punto es interesante analizar antes
de sentarme a negociar una matriz DAFO.
Debilidad - Amenaza - Fortaleza - Oportunidad
¿En qué me considero DÉBIL? ¿A qué personaje interno se lo
adjudico?
¿Qué es una AMENAZA para mí? ¿Cuál de mis personajes internos
es el que me amenaza?
¿En qué me considero FUERTE? ¿Quién es el fuerte de mis
personajes internos?
¿Dónde me encuentro con la OPORTUNIDAD? ¿Quién me la
ofrece?
Si podemos contestar en palabras estas preguntas, hacer la
reunión de consorcio, no nos supone peligro alguno, sólo nos
prepara para ella, porque vamos a estar más cerca de descubrir
sin juicio, aspectos interesantes de nuestro ser.
Las reuniones deberían llevarse a cabo cada mañana y cada
noche al menos. Las mañanas para planificar el día en paz y gozo,
y las noches para controlar los resultados, y desechar las
dudas. Tomar las preguntas que todavía quedan y soñar en paz
con las respuestas que el inconsciente pueda proporcionar.
Aunque lo mejor sería siempre tener a mano, reuniones de
consorcio, o de a pares, y crear personajes que nos sirvan de
ayudantes para casos de emergencias.
Por ejemplo, sería maravilloso contar con una madre amorosa
que tenga a su cuidado al niño que llevamos dentro.
Los ayudantes, y aquí los voy a llamar ÁNGELES, son de gran
utilidad. Es esa parte poco común que tenemos dentro que nos
consuela cuando necesitamos, nos ama sin condiciones y esta a
nuestra disposición para todos nuestros deseos, felices cada
vez que son usados para nuestro gozo. Ellos lo tienen claro, son
felices con nuestra felicidad. Y lo mejor, tiene un aspecto maravillosamente
saludable, no nos dejan solos, ni nos abandonan.
Están a nuestro servicio para nuestro mayor gozo.
Prueben, pónganle un nombre a vuestro ángel y PIDAN.
Cualquier cosa, no tiene que ser algo especial y único. Cualquier
cosa que deseen de verdad.
Como conclusión de lo explicado podría decirse:
1. La negociación no es una competencia. Se puede encontrar
un mejor trato para ambas partes.
2. Tiene más poder del que cree. Descubra los límites en la
observación de su interlocutor interno.
3. Escriba un plan. Sólo tome decisiones luego de haberse
puesto de acuerdo con las partes.
4. Sin importar qué tan grandes sean las diferencias. Piense,
todo es para ganar. Lo que se pierda no sirve, suelte para tomar,
deje de caminar si siente que se aleja.
5. No hable. Escuche sin criticar.
6. No se sienta limitado por la posición o la autoridad. Ud. es
el presidente de su consorcio, por más traumático que haya sido
el evento, Ud. no lo está reviviendo. Ud. está viviendo su vida
ahora.
7. No se sienta limitado por los hechos, promedios o estadísticas.
Los demás no tienen nada que ver con las decisiones que
Ud. toma en su vida. Los demás tienen más o menos poder según
Ud. se los haya dado. El poder está en sus manos. Y su
fuente es el amor.
8. Una negociación difícil tiene conflictos. La persona que tiene
la necesidad de caer bien, esta propenso a ceder demasiado.
9. Ponga metas más altas. Aproveche las oportunidades que
se le presentan a partir del auto-conocimiento. Sea paciente.
¡Recuerde su meta!
10. Esté presente lo más posible, y no en términos de tiempo
lineal, de hecho estas reuniones no trabajan en el reloj, funcionan
fuera de él. Disfrute.
Existen 2 tipos básicos de negociación en estas reuniones,
aplicables al interior como a los otros:
• de colaboración y/o cooperación
• de subordinación
Las de COLABORACIÓN, hacen hincapié en lograr metas comunes
que beneficien a ambas partes. Son las que propongo
como de común uso.
Las de SUBORDINACIÓN son aquellas en las que una de las
partes decide posicionar sus metas por debajo de las otras, con
el fin de evitar conflictos. Este tipo de negociación sólo la debemos
utilizar cuando recurrentemente algún trauma del pasado
no nos permite habitar el presente.
Al principio, será por medio del uso de la voluntad, con esfuerzo,
hasta poder escuchar sin pasado qué tiene esa parte de
nuestro yo para decirnos, y darnos una respuesta apropiada
que nos satisfaga. Dejando ir el pasado amorosamente, sólo para
volver a tener una reunión negociadora de colaboración.
Estas reuniones sirven especialmente si son de a dos, mi
adulto con mi niño, por ejemplo. Para poder escuchar sus voces
con más atención y sin exposición a las otras voces internas, para
que esa parte pueda expresarse en libertad y sin juicio de
ninguna otra.
Es una solución para emergencias, debo recordar una vez
más que las reuniones de negociación interna propuestas son
de colaboración y cooperación.
martes, 22 de noviembre de 2011
CONVENIENCIA 1
Nada es gratis en esta vida, TODO tiene COSTO aunque no tenga precio...
Conveniente: es lo mismo útil, oportuno, provechoso, bueno
para mí.
Significa correlación y conformidad entre dos cosas distintas.
La conveniencia es lo que dos distintos firman de acuerdo,
con conformidad de recepción de renta justa o haberes, porque
se trata de acordar entre partes con beneficio para ambas.
En principio debemos ponernos de acuerdo, en conformidad
con nuestro o nuestros clientes internos.
¿Quiénes son nuestros clientes internos?:
El niño (el que siente)
El joven (el que se atreve)
El adulto (el que decide)
El anciano (el que critica)
En principio estos son nuestros cuatro socios internos mayoritarios,
puede haber más o menos según lo que nos haya sucedido...
deformamos con el pasado nuestra realidad presente de
distintos modos.
Para volvernos activos positivamente en el presente debemos
desarrollar una “reunión de consorcio”, al menos diaria, que
coordine nuestra acción en conjunto y nos vuelva coherentes,
unidos en la acción.
Siempre debemos tener en cuenta los roles de cada uno de
nuestros clientes internos y primero satisfacer los deseos de cada
uno. Uno de los errores más comunes es reprimir los deseos
del niño interno, que es el rol a través del cual nos permitimos
sentir. Éstos provocan reacciones que pueden acabar en desastres
emocionales solamente, tales como ataques de pánico, depresión
y surmenage, por nombrar algunos.
Reprimir al joven sólo genera frustración y miedo a probar, a
experimentar. Es cuando nos paralizamos y dejamos de hacer.
Callar al anciano llama al castigo, al juicio y al prejuicio como
forma de aprendizaje.
El adulto que está encargado de las decisiones es el que puede
escuchar, elegir y dirigir, ya que sabe de donde vienen las demandas
de los otros roles, y elige según su conveniencia. Entonces
las reacciones se transforman en acciones a nuestro favor.
Hay dos frases muy útiles para tener a mano en estos casos.
“Lo previsible no es peligroso”
Con esta volvemos liviano a lo que nos es difícil de aceptar,
nos conocemos.
“Mi bienestar es el bien común”
Si no estamos bien, todo lo que oiga estará teñido por la voz
de cualquiera de los personajes internos reprimidos o insatisfechos
que querrán desesperadamente resolver una carencia, generalmente
con más carencia. Como una urgencia y sin consciencia
de porqué terminaremos haciendo desde el pasado, más
de lo mismo, provocando así que la insatisfacción y la frustración
sean cada vez mayores.
Poner de acuerdo a las partes para que se desarrollen y experimenten
el presente de modo nuevo es una tarea que requiere
de paciencia y de silencio para escuchar al cuerpo, la intuición,
el pensamiento y el sentimiento y satisfacer mis deseos en armonía.
Sin un orden en particular, sólo con escucharnos, desarrollaremos
el mejor orden, el que debe ser para cada circunstancia.
Sin prisa, haciendo una pausa cada vez que lo necesite
para contactarme con lo bello, la virtud que me sea más sencilla
de encarnar, gentilmente, sin sorpresas, terminaré sorprendiéndome
de lo agradable que puede ser mi vida en este momento.
La tarea de negociar es sencilla si partimos de un principio
básico, debemos estar en silencio antes de cada reunión, en un
silencio particular. Lograr este silencio, es lo que los monjes de
cualquier religión hacen. El silencio se logra cuando se deja hablar
a los participantes de la reunión, y uno empieza a prestar
atención desde el adulto a cada uno, sin juicio. Uno escucha a
cada participante y da una respuesta a cada una de sus preguntas,
sin anticiparse, como si fuese de verdad un desconocido.
Por ejemplo, el niño está a los gritos en nuestro interior. ¿Qué
debemos hacer? Si le gritamos, va a gritar más. Si lo asustamos,
probablemente se calle pero nos guarde resentimiento. Si lo
consolamos y tratamos de explicar con palabras que él pueda
entender, dulce y calmadamente, cuál es nuestro propósito, probablemente
se sienta feliz, calmado y comprendido, y sus propuestas
de goce en el intercambio sean muy interesantes.
Siempre tendrá algo divertido y tierno que decirnos.
Si el anciano también está a los gritos y no lo escuchamos,
probablemente busque la forma de demostrarnos cuán equivocados
e inútiles somos, después de todo es el dueño de la experiencia.
Él como nadie, representa nuestro pasado. Tiene la
voz de nuestra experiencia, y según cuán deformada esté será
más o menos cruel con nosotros y nos impondrá castigos.
Si escuchamos con atención puede que nos brinde alguna información
útil, que pueda acceder a nuestra compasión, comprensión
y perdón, para dejar ir lo que ya no es. Y nos libere,
nos dé permiso para una nueva aventura.
Si es el joven quien está exacerbado y exaltado, podremos
decirle que deje de molestar, que é l no está a cargo y volverlo
responsable de cualquier aventura que no nos haya salido bien,
y se callará. Podríamos, en cambio, escuchar sus propuestas
siempre interesantes, que nos revitalizará, nos pondrá en la pasión
de hacer. Escucharlo nos permite descubrir nuevas cosas
de nosotros en la acción y la experiencia gozosa. Y él va a gozar
de nuestros planes junto a nosotros.
Después de todo, me preguntarán que dirá el adulto. Ya ha
escuchado a todos, y habrá dado una respuesta, que satisface
las expectativas de su vida dentro nuestro, a cada uno de los integrantes.
Este es el momento del silencio. El adulto puede ahora
sentarse a observar todos los rostros que forman parte de este
consorcio con una mirada amorosa y pacífica, todas estas son
partes de uno mismo. Y luego en paz, tomar las decisiones más
apropiadas eligiendo sin sentir, sin pensar, ni criticar, y con una
gran ventaja, SABIENDO QUE TODAS SUS PARTES SON UNA
MISMA EN EL PLAN DE VIVIR.
lunes, 21 de noviembre de 2011
COMPAÑÍA 6
La última parte de Compañía..
AMIGOS
Afecto personal, compartido con otra persona, que nace y se
fortalece con el trato.
Un amigo es alguien con quien comparto afecto desinteresado,
puro y personal, con quien me relaciono en libertad. Mi negocio
con él es la amistad. No es una palangana para vomitar
cuando me peleo con alguien, para que me dé la razón, ni sólo
está para compartir mis miedos de ser. Un amigo es alguien que
me apasiona porque tenemos la ventaja de elegir cuando queremos estar juntos y cuando no. Se lleva lo mejor de uno, incluso
cuando no haya nada que hacer. No existe ningún compromiso,
excepto sentir amor, dejarme amar, ser amado. Mis amigos
son libres por naturaleza.
Cuando el precepto de la libertad se corrompe en aras de la
cercanía o de la profundidad, uno dejó de ser amigo. Seguramente
el otro nos lastima o permitamos que nos lastime. ¿No es
lo mismo que otro nos lastime que provocar que lo haga, ¿Quedarnos
en una relación, discusión o diferencia de opinión para
salir lastimados? Entonces uno tiene que volver al centro y preguntarse,
¿es mi amigo?
Si se comporta como un extraño, NO LO ES. Por favor, espere
a que su amigo vuelva para encontrarse con él. Y acepte que tiene
a ese extraño dentro suyo, y dentro de él que puede corromper
la relación. Si no puede hacerse bien, recuerde:
NO HAGA NADA
LOS SOCIOS
Personas asociadas con otra u otras para algún fin. Recuerde
que Ud. está asociado a alguien con un fin determinado. El otro
no es dueño de sus expectativas, ni de su logro. El otro es un colaborador
en un proyecto que ambos comparten, con el fin de
hacer realidad los sueños de cada uno.
Ud. deberá poner reglas que refuercen la relación profesional.
Ud. NO es amigo, pariente, hijo, padre, ni esposo de su socio.
Cada espacio debe tener reglas bien definidas, funciones y opiniones
que lleven a resultados que los acerquen cada vez más a
los logros individuales. Un socio no es un hermano, ni mi subordinado,
ni mi amigo. Es con quien comparto información, recursos,
habilidades y resultados en pos de mi logro individual.
Si no puede poner esto en claro, Ud. está en problemas. Alguno
de los dos no es socio en su firma.
Esto, ¿significa que uno no puede querer mucho a su socio?
Sí, claro. Cuando salen del trabajo y se sacan el traje de socios,
pueden incluso hasta ser marido y mujer, pero dentro del
trabajo estos roles NO EXISTEN. Desvían el fin.
No trabajan juntos marido y mujer para quererse más. En el
trabajo estamos para generar dinero. No para amar, para que
me acepten o para ser reconocido. Uno trabaja en lo que le gusta
para obtener ganancias y gastarlo como mejor le parece en la
vida.
No nos interesa lo que hizo nuestro socio con el dinero. “En
vez de comprarse la casa, se compró un auto”. “Se fue de viaje
cuando en realidad necesitaba...”. La vida personal de nuestro
socio, es de nuestro socio, aunque sea nuestro marido.
Si es un matrimonio, las decisiones se discutirán allí, dentro
del matrimonio. Si son padre e hijo, serán en la familia, pero en
el trabajo, las discusiones y los intercambios se hacen allí, no
en otro lugar.
Parece mentira, pero es difícil para la mayoría de las personas
reconocer su negocio con el otro, sin confundirlo. El
propósito de una sociedad debe estar presente en cada uno de
los proyectos con el otro. No se puede perder de vista el “para
qué ” estoy trabajando con esta persona.
El sentido de una sociedad es hacer negocios. El fin de los
negocios es obtener utilidades. El marketing es una disciplina
que promueve la obtención de mayores utilidades en todas las
áreas de la empresa.
LA TOMA DE DECISIONES
Para la toma de decisiones debemos contar con información.
La calidad de la información debe ser lo más sencilla y clara posible.
Debemos tomar en cuenta que ésto no garantiza ningún
resultado, sólo muestra con cierta certeza la cantidad de información
disponible a la hora de elegir.
Como ejemplo, vamos a utilizar la compra de un auto y los criterios
que se utilizan de modo común.
Identificación del deseo: “Quiero comprar un auto”.
Criterio para la toma de decisión:
Recursos De cuánto dinero dispongo
Cuánto puedo financiar
Paisaje ¿Para qué lo voy a usar?
Condición Nuevo / Usado
Cualidades Confiabilidad / Durabilidad
Nafta / Diesel / Gas
Precio
Adicionales o Comodidades
Gastos Seguro / Patentes
Gustos 5 / 4 / 3 puertas
Color
Lo importante es sentirse satisfecho y disfrutar del proceso.
Después de haber elegido las características que más se acercan
a la realización de la compra, le asigno peso a los criterios.
Califico las cualidades elegidas entre 0 (cero) y 100 (cien),
para después calcular en porcentajes.
Luego desarrollo todas las alternativas posibles, y combino
las cualidades en porcentajes.
Tomo las alternativas que más se acerquen a lo que deseo.
Las compruebo en la realidad para chequear que los datos
que evalué sean correctos, y de ese grupo vuelvo a seleccionar.
Sólo después hago la compra y evalúo el beneficio.
¿Qué puede pasar? Nada que no me guste, me tomé el tiempo
necesario para tomar decisiones y fui probando de a poco
hasta invertir. Estoy tranquilo porque la decisión fue la correcta,
en el tiempo correcto y del modo correcto.
PLANIFIQUÉ sin ponerme un plazo que determinase mis acciones,
sino evaluando los recursos disponibles y poniendo foco
en lo que quería lograr.
ORGANICÉ toda la información necesaria que me permitiese
estar en contacto con el campo de probabilidades.
REVISÉ las conclusiones a las que había llegado con los que
saben del tema y dirigí los recursos y energía necesarios para la
obtención de resultados.
CONTROLÉ teniendo la certeza que la decisión que tomé se
acerca lo más posible a mi realidad en este momento. Esta decisión
es la mejor ahora, por ahora.
Siempre podemos cometer un error, lo difícil es que no podemos
perdonar, nos culpamos en vez de responsabilizarnos, y
eso no permite corregir sin prejuicios sobretodo cuando sentimos
que no hicimos lo suficiente, y vamos en busca de un resultado
inmediato en vez de lo que queremos lograr.
Es importante saber que los dueños del libre albedrío somos
nosotros y que siempre podemos modificar nuestra realidad para
acercarnos más a lo que soñamos, como un paraíso distante
a un paraíso REAL que comienza en el terreno que pisamos...
domingo, 20 de noviembre de 2011
COMPAÑÍA 5
• TRAMPA NÚMERO CUATRO: SOBORNAR O CORROMPER
¿Qué importa quién tiene el poder o quién lleva los pantalones
en la casa?
“Si haces lo que digo, te compro tal cosa o nos vamos de vacaciones,
o cambiamos el auto, o nos mudamos”.
¿Cómo es esto?
¿No debería ser una discusión, un intercambio de opiniones
sobre lo que nos conviene en este proyecto que tenemos juntos
llamado PAREJA?
“Ah, no me seduce. No me propone hacer el amor.”
Bueno, ¿entienden que la libertad se ve afectada por todas
las razones anteriores y que la sospecha corrompe lo que hizo
nacer en la realidad a esta pareja? ¿Qué es esta estupidez de
pensar que uno o el otro debe ser el que proponga? ¿O que si el
otro me dice que está cansado, le duele la cabeza, o no tiene
ganas, todo en la relación está mal?
Conozco casos donde mujeres y hombres que se ven obligados
a tener sexo o sienten que para tener sexo, o debe ser a
cambio de algo.
Esta es un arma de destrucción masiva del amor.
El otro no me importa, no comparto el gusto de estar con el
otro. Le estoy pagando, compensando o sobornando para conseguir
más pasión, más deseo, más aventura. Es mentira. No se
están dando valor, ni le están dando valor a nadie.
Preferible que hagan ejercicio y/o cómprense un perro.
No digo que esté mal, pero no es HACER EL AMOR. Hacer el
amor depende de la imaginación, creatividad, gustos, y sobre
todo, del placer compartido.
¿Qué clase de amor estamos compartiendo? Si no es espontáneo,
libre y sentido, ¿estamos haciendo el amor?
Es como comparar la diferencia entre cenar y compartir degustando
la cena. Y Uds. saben que no es lo mismo.
• TRAMPA NÚMERO CINCO: SEPARAR O DIVIDIR
El final de la historia es que no sólo no estoy escuchando al
otro, sino que no me estoy oyendo. Hago enormes esfuerzos para
pararme en el presente pero está teñido del pasado, y la memoria
no sirve para otra cosa que para quitar las mejores intenciones
fuera del campo de la probabilidad de ser feliz. Dejo de
creer que hacer feliz al otro me hace feliz.
Perdí la perspectiva, la capacidad de observación. Todo está
teñido de juicio.
“MI FELICIDAD ES SU FELICIDAD”, se perdió, lo perdí.
Si puedo perdonar y puedo perdonarme, puedo corregir, no
para estar atada a una persona de por vida, sino para amar, sentirme
amada, ser amable y dejarme amar en absoluta libertad y
con absoluto gozo, ahora, siendo yo misma, aquí, y permitiendo
al otro ser como es.
Aceptar el amor, no significa aceptar lo inaceptable. Sino
compartir lo aceptable por el bien común, que no es otra cosa
que mi propio bienestar. Con sabiduría, sintiendo el sabor de la
vida junto al otro.
Si esto no es posible, si la reparación no alcanza para perdonar,
habré logrado romper la magia de amor. Y si mi libertad no
tiene precio, la del otro tampoco. Lo mejor es dejar de lastimar y
lastimarme. E intentar recordar siempre, muy seguido, que el
amor nos hace libres. No sirve retener a alguien que no nos ama,
porque no nos estamos amando, ni sentimos amor, ni nos dejamos
amar, ni estamos siendo amables, ni nos sentimos amados.
De todas formas, tener pareja o no, es una elección que sólo
puede hacerse en compañía de otro. No es posible solamente
querer tener una pareja. Tiene que existir otro que también
quiera. Y en este punto sólo depende de nosotros una parte, la
otra depende de algo más que no está en nuestro control.
La pareja es una manifestación más del amor que podemos
sentir. No es indispensable, es una de las formas del amor. Es
maravilloso, tan maravilloso como el encuentro entre cualquiera
de los seres que forman parte de esta vida. Porque cada vez
que me encuentro en el otro me vuelvo a conocer. Y el amor que
siento lo llevo conmigo eternamente. Entonces, no elijo una pareja
permanente, ni “hasta que la muerte nos separe”,
ELIJO UNA PAREJA ETERNAMENTE PRESENTE.
sábado, 19 de noviembre de 2011
COMPAÑÍA 4
• TRAMPA NÚMERO UNO: SOSPECHAR O SUPONER
De hecho nosotros no somos las mismas personas a la mañana
que al mediodía, vamos sintiendo distintas cosas que nos
afectan durante el transcurso de la jornada. Vinimos a afectarnos
de lo que nos rodea y a experimentar. Doy por seguro que
conozco al otro, que sé lo que quiere, desde qué quiere para desayunar,
hasta qué me va a contestar, aún sin haber preguntado,
y que además debería saber lo mismo de mí.
No es cierto. Amar o amarme significa reconocerme continuamente,
y volver a amarme en todos los aspectos de mi ser.
Ejemplo: “Yo sé que piensa esto… por eso hizo lo que hizo…
o me dijo esto”.
ERROR: “Si me gustó la vez anterior, seguro que ésta me va a
gustar”.
ERROR: “hace 5 años que soy su amiga. Si antes me gustaba
estar con é l, ¿cómo puede no gustarme estar ahora?
ERROR: “Tenemos una vida juntos, no puedo renunciar a lo
que tenemos.”
Amar es conocer y conocerme continuamente. Cuando este
proceso se ve interrumpido por el pasado o por el futuro, ESTAMOS
DEJANDO DE AMAR. Amar es amarlo/a en cada momento
porque me amo en cada momento. Amarse significa respeto por
lo que el otro siente, en absoluta libertad. Si el compromiso no
está puesto primero dentro de uno, no es compromiso y nadie
se merece otra cosa que mi amor como respuesta a su amor. La
inocencia me permite descubrir y redescubrir al otro. La culpa y
el resentimiento me quitan esta posibilidad, me limitan. La monotonía
es un absurdo de este modo. Todos somos un universo
para descubrir, y el otro es un universo donde me descubro.
• TRAMPA NÚMERO DOS: SOSTENER O CONTROLAR
Nuestro ego debe estar puesto en el lugar que corresponde,
dentro nosotros.
No puedo relacionarme pensando que si advertimos a alguien
acerca de algo, debe actuar como nosotros dijimos que debía.
¿Quiénes somos en la vida del otro? Si nosotros mismos nos la
pasamos repitiendo patrones. ¿Por qué sentimos a nuestro ego
lastimarse cuando el otro no hace lo que le decimos o pedimos?
Uds. dirán, pero le dijimos que terminaría mal.
Si Uds. se ven comprometidos con la decisión del otro...
¿Cómo no se dieron cuenta?
• TRAMPA NÚMERO TRES: SOCAVAR O HERIR
Una vez le dije a alguien que ponerlo en duda era ponerme en
duda. Lastimar a quien amo es lastimarme, no me hace mejor.
“¿Cómo no se va a dar cuenta que me duele?”.
Y si no le dicen lo que les molesta y les duele, ¡¿cómo se va a
dar cuenta?!
“Si le digo lo que me duele, no me va a querer más”.
Si no les dicen lo que les duele o les molesta en libertad, ya
no lo están queriendo, están queriendo una imagen del pasado
que compartieron, no una del presente.
Usar la culpa, el rechazo, el resentimiento una y otra vez, para
que me diga que me ama, sin decirle al otro lo que siento, es
no creerle que me ama, aunque me lo diga.
Somos una y otra vez mentirosos con nosotros mismos. No
puedo sentir amor por nadie más si no siento amor por mi mismo.
Sólo puedo amarme, sintiendo amor, dejándome amar, siendo
amable y sintiéndome amada/o, y todo eso depende pura y
exclusivamente de mí. El otro no tiene nada que ver. A partir de
mí todo es posible, y nada es para siempre, gracias a Dios...
EL AMOR TE HACE LIBRE.
Es una cuestión de control: “Si no tengo al otro controlado,
puede dejar de amarme”. ¿No les parece tonto? Si tenemos que
tener al otro controlado, ¿lo amamos?
Siéntase libres, y dejen al otro en libertad. Si el otro no se
siente en libertad de amarlos, ¿para qué lo quieren a vuestro lado?
Uds. valen tanto como el otro y se merecen que el otro los valore.
Si les es necesario controlar o sostener al otro para que se de
cuenta de lo que vale para Uds., no pierdan el tiempo. Accionen,
dénse cuenta, Uds. están poniendo atención y amándose a través
del otro.
Cuánto los pueden amar, si no se aman a sí mismos. ¿Se están
amando Uds. a Uds. mismos?...
viernes, 18 de noviembre de 2011
COMPAÑÍA 3
CUARTO:
• Estar presente en tu vida es tu primera responsabilidad.
Si tienes hijos, ellos están adelante, pero no primero, porque
si no estás presente y amándote, ¿quién está para amarlos?
¿Qué capacidad de amarlos tienes si no tienes la capacidad
de amarte a ti mismo?
De allí en adelante, no hay un orden. No hay una valuación
del amor que das, porque el amor que das es igual al amor que
recibes, que es igual al amor que pides, que es igual al amor por
el que agradeces cada día de tu vida.
Lo que hay que tener en cuenta, es ser humilde, ocupar el
propio espacio.
El defecto de la humildad es por vergüenza, el exceso es por
miedo.
Soy únicamente yo mismo, vuelvo a mi centro cuando soy humilde.
Puedo perdonar cuando soy humilde. Soy paciente cuando
soy humilde. Me siento mejor cuando soy humilde. Si soy humilde, es porque estoy presente. No me salí de mí para ocupar
con mis opiniones respecto de cómo deberían ser las cosas, poniendo
reglas estúpidas que ni siquiera puedo cumplir.
Soy humilde, me amo, ocupo mi espacio y estoy atento con la
mejor intención de asistir a la vida en vez de resistirla.
Soy profundamente humilde, me acepto y dejo de poner resistencia
a la abundancia del Padre.
No interesa mucho si es el novio, la novia, el marido o
la esposa, el tema es no irse de centro.
El amor que siento es todo mío y me pertenece.
Esa frase cobra real forma y significado en la práctica. No es
posible que el otro complete nada de mí. No me realizo a través
de otro. Me realizo a través mío.
¿Qué les estamos pidiendo a nuestras parejas hoy? Las relaciones
se tornan cada vez más superficiales, más difíciles sobre
todo cuando ponemos las expectativas de la felicidad en el otro.
Cuando creemos que hay sacrificios para poder compartir.
“¡Yo me quedé en casa cuidando a los chicos por vos!”;
“¡Yo trabajé toda la vida para mantenerlos!”.
No se hagan trampa, lo que hicieron lo hicieron por Uds. y si
no fue así, lo que hicieron estuvo fuera de lugar, hubiese sido
mejor que no lo hubieran hecho. Se sacrificaron porque a Uds.
les pareció lo mejor,... ¡y después, reclaman al otro el reconocimiento!
No es justo, ni para Uds., ni para los demás. Ud. son los
dueños del poder de decir en libertad… “Sí, gracias” y “No, gracias”,
siempre que antes se hayan elegido primero. Si Uds. no
están primero, están resolviendo una necesidad, no satisfaciendo
el deseo de estar acompañado.
Hay un gran secreto que ayuda a mantener el centro, ¿cuál es
el negocio de tener una pareja? La respuesta es el AMOR.
Con todas sus formas, la familia es una proyección del amor,
un proyecto de amor, no es la pareja.
Uds. se podrán preguntar: si uno está completo, ¿para qué
tener una pareja?
Aquí se manifiestan las cinco “C” de Compañía en:
- Para confirmar, ¿ves lo mismo que yo?
- Para consolar, ¿te duele como a mí?
- Para contener, ¿sientes lo mismo que yo?
- Para compartir, ¿te gusta lo mismo que a mí?
- Para crear, ¿eres como yo?
En vez de las cinco formas de "S" oledad:
- Sospechar o suponer
- Socavar o herir
- Sostener o controlar
- Sobornar o corromper
- Separar o dividir
jueves, 17 de noviembre de 2011
COMPAÑÍA 2
Todas las familias están compuestas por el padre, la madre y
el hijo o hija.
Uno de los diez mandamientos dice:
“Deberás honrar a tu padre y a tu madre”.
¿A quiénes se refiere?
Una vez me encontré sentada en la banca de una iglesia en
Pascuas, justo cuando el sacerdote decía lo que en ese momento
me dolía más. Hago referencia a sus palabras, que aunque no
exactas, me dieron el puntapié inicial para el cambio que busqué
durante muchos años.
Resulta ser que cuando uno nace necesita, y repito: “necesita”
de sus padres. Es indispensable la figura paterna y materna
para la crianza, no interesa si nosotros queremos o no a nuestros
padres, LOS NECESITAMOS para alimentarnos, asearnos,
hacernos sentir seguros y cómodos, y su responsabilidad es
querernos. Ellos, a la hora en que empezamos a desarrollarnos
y para nuestro bien, nos ayudan en nuestro propio descubrimiento
del mundo, poniendo reglas. “Esto, sí”, “Esto, no”. Y en
la medida en que crecemos, las reglas se van acomodando a sus
circunstancias. Lo que ellos consideran que es más seguro.
Nunca se plantean de donde vinieron las reglas que nos ponen,
es para su propia comodidad en nuestra crianza, después
de todo, ahora tienen una gran oportunidad de hacer bien distintas
las cosas. ¿Saben algo? Repiten patrones condicionados
por sus propios miedos. No adoptan una mirada renovadora,
llevan la contra a sus padres o piensan que razón tenían, pero
no encarnan al padre o a la madre que quieren ser. De hecho:
“no molestes a papi, está ocupado”, o “no molestes a mami, está
cansada”, son frases de uso común y casi ya no existen porque
reemplazamos a mami y a papi con la tele y la computadora.
Y si no molestan, mejor. De lo único que se ocupan mami y
papi es que tengan lo mejor de lo mejor y resolver cualquier capricho,
con tal de que no molesten. Si eso es pasar tiempo de
calidad, quiero decirles que no sé qué están haciendo leyendo
este libro...
Papi y mami, tienen el derecho y la responsabilidad de ser felices.
Y eso es lo primero que deben aprender y enseñar a sus
hijos.
Y para que seamos felices, debemos aprender a encarnar la
felicidad nosotros en nuestra compañía, la íntima.
Saber decirnos “sí, gracias” y “no, gracias”, a lo que nos hace
bien y a lo que no nos hace bien, antes de traer una vida al
mundo y destrozar no sólo la nuestra, sino la de nuestros hijos.
Y para todo eso tenemos que estar PRESENTES en nuestra propia
vida (que incluye a nuestros hijos). Y NO MEZCLAR nuestro
proyecto familiar con nada como por ejemplo, ¨Yo me realizo a
través de mi hijo¨. “Este proyecto lo hice por él” o “todo lo que
es me lo debe a mí”, y todas esas cosas que cargan a nuestros
pobres hijos de mandatos y culpas inútiles.
Como lo hizo con nosotros, de hecho nos pasamos una vida
tratando de que papá nos quiera y mamá nos acepte. ¿En verdad
queremos enseñarles a nuestros hijos que los tuvimos para
que tuviésemos una vejez protegida? ¿O queremos en realidad
ver que nuestros hijos son felices y vienen con gusto a
acompañarnos y gustar de nuestra presencia en la vida?
Cuando somos pequeños nos volvemos expertos manipuladores
en absoluta inocencia, porque partimos de la premisa básica:
“si nos cuidan, nos quieren”. Les creemos a papá y a mamá
que nos quieren, sin ninguna duda, y no vemos segundas intenciones,
ni miedos ocultos, ni manipulaciones para obtener
amor. Cuando crecemos, perdemos la inocencia, perdemos la
mirada inocente de lo que es y empezamos a ver estas cuestiones.
El problema es que nos cuesta aceptarlo y continuamente
tratamos de cambiarlo, con nuestra presencia o sin ella, creyendo
que de esta manera nos hacemos presentes. Y la verdad es
que hacernos presentes requiere de un doble trabajo.
PRIMERO:
• No hay nadie mejor que tu padre y tu madre.
La verdad es que como hijos de por sí, por ser hijo, evolucionamos
y somos mejores que nuestros padres. Porque ellos nos criaron
y educaron para que seamos mejores, sólo por ese hecho.
Ellos son los padres de tu falso yo, cuando te inculcaron miedo
y desconfianza. Y son los padres de tu verdadero yo cuando
se ocuparon de tu felicidad.
Ellos estuvieron en esta vida como pudieron, no hay excusas
para hacer más de lo mismo.
SEGUNDO:
• Para encarnar el padre o la madre que quieres ser, debes
aspirar a estándares más altos de los que ellos te proporcionaron.
A eso me refiero con el Padre y la Madre. Y no me importa la
religión. La única forma de encarnarlos es sentirte hijo o hija, de
los padres de tu conciencia, TU VERDADERO YO.
TERCERO:
• No puedo acompañar a nadie de la familia, si no estoy presente
en mi propia vida. No necesito reunirme y criticar a unos
con otros, ni a otros con unos para formar parte de la familia.
Este juicio se vuelve continuamente en mi contra.
Puedo estar presente para decir cosas agradables, tristes, felices,
transformadoras, para construir, realizar, crecer, crear o ser.
Si mi familia no puede comportarse de este modo, pues siempre
tuve la elección de dejar entrar por un oído y salir por el
otro, retirarme, hacer silencio, no participar, aceptar que son lo
que son, pero siempre la premisa es SER YO MISMO EN LIBERTAD,
que es lo mismo que amarme amándolos.
COMPAÑÍA 1
La libertad de elección debería ser el primer nuevo mandamiento…
Yo tengo el derecho y la responsabilidad de ser feliz.
Se usa especialmente como definición estar acompañado de
la fortuna, de un estado, de una cualidad o de una pasión: existir
o hallarse en una persona. La compañía se trata de participar
junto con el otro en la aventura de la vida, compartir o servir. La
compañía se vive, se experimenta, se practica, aún en lo que llamamos
soledad. Uno no puede ni debe dejarse solo, de hecho
es una imposibilidad que así suceda, uno siempre está acompañado
por una cualidad al menos.
De allí la cuestión fundamental es que para tener acceso a la
plenitud de los potenciales, uno no debe ¨dejarse¨ solo. Dejarse
solo y abandonarse es lo mismo. Es dejar de estar atento a
las virtudes de las que ya uno es dueño, y lo que es peor, es ir
detrás de aquellas que no son nuestras, poner nuestra mirada
en otras personas. Es promover los celos y la envidia. Es abandonarnos
detrás de la vidriera con la nariz pegada a la vitrina y
quejarnos de que no podemos comprar, ni tomar. Aún si pudiésemos
comprarlo, no tendríamos satisfacción porque estamos
satisfaciendo una carencia, en vez de un deseo.
Un deseo se satisface en compañía, en compañía de uno mismo.
La conciencia acompaña a la intuición, los pensamientos, la
emoción y las acciones. La presencia es absolutamente indispensable
a la hora de poner en funcionamiento nuestro potencial.
Si estoy presente… es imposible que esté solo.
Estoy yo con todos esos “otros yo” experimentando el sabor
de la vida, saciando la sed de la experiencia y obteniendo sabiduría,
junto a mi conciencia, que sabe que existe este lugar pleno
y feliz con todos mis deseos absolutamente satisfechos por
un Padre y una Madre, los de mi conciencia, que están más allá
de la experiencia de la vida que estemos transitando, absolutamente
presentes, eternos y perfectos.
lunes, 14 de noviembre de 2011
CONFIANZA 5
Es importante saber que la forma de encarnar la Fe es a través
de la virtud. La certeza de que el resultado sólo nos acerca
al logro. Mantener la libertad de equivocarme y de corregir,
siempre a mano. La flexibilidad como la capacidad de descubrir
algo nuevo de nosotros mismos sin juicio. Si es descubrimiento
siempre es bueno. La Fe de que todo lo que hacemos nos lleva
a nuestro propio bien y que todo lo que dejamos de hacer también.
El gozo funciona como el sentido del gusto, de la afinidad,
cuando hay que elegir y la sabiduría de soltarse de la experiencia,
cuando se suelta la pelota, con la certeza de que todo está
dispuesto para la satisfacción del deseo, en plenitud. No sólo
una parte, no les pide la renuncia al gozo de ninguna experiencia
de la vida, sino la renuncia de quien crees que eras en el pasado
para encarnar ¡QUIEN ERES AHORA!
Con la libertad de repetirte sin juicios.
Yo soy el que soy y cumplo las promesas que me hago a mi
mismo con disciplina y voluntad, pero sin esfuerzo y con gozo,
intentando pasar cada vez más tiempo en paz y gozo, ante cualquier
circunstancia que la vida pueda plantearme.
Si no nos gusta... saber en nuestro interior que pasará, y que
siempre podemos cambiarlo. Si nos gusta, saber que lo disfrutamos
y que también pasará y siempre está en nuestro poder
hacerlo. Sin la predisposición de creer que la fórmula que antes
nos sirvió, nos va a servir para más adelante. Nada del pasado
funciona de la misma manera en el presente.
La confianza es como la vida, un juego, sólo podemos experimentarla
y está en nuestro control exactamente el cincuenta
por ciento, el resto no está en nuestras manos.
Hay varias leyes, la de gravedad, por ejemplo, que puede alterar
el resultado. Aún conociendo esas leyes hay una parte que
no depende en absoluto de nosotros y sin embargo, está ahí, en
la intuición y la percepción, en el observador que altera el resultado,
en la consciencia. Más allá de la intuición, los pensamientos,
los sentimientos y la acción. Es en esa parte donde debemos
confiar en que cualquiera sea el resultado, será lo mejor
para nosotros en ese momento. Y que esa experiencia es la que
nos acerca al logro, y seguir probando no por supuesto del mismo
modo, aprovechando la corrección sobre lo que sí podemos
controlar sabiendo que cada vez estamos más cerca del resultado.
Porque cada vez que nos equivocamos aprendemos algo
distinto de nosotros mismos. No decimos, no puedo, sino que
siempre nos disponemos con la mejor actitud a hacer en ese
momento lo mejor.
Confianza es con Fe, saber que el logro de todos modos se
realizará y la satisfacción está dada como consecuencia.
El PADRE jamás niega los deseos del hijo. Nuestros deseos ya
están satisfechos, más allá de la experiencia.
Creer esto y repetirlo varias veces al día, proporciona paz y
soltura en el juego de la vida.
Por otra parte, la confianza tiene todo que ver con el presente,
no tiene que ver con el pasado y aún menos con el futuro.
¿Recuerdan?
El miedo es una experiencia con una percepción desagradable
o negativa del pasado, que condiciona el futuro y colapsa el
presente.
Si creo que no tuve habilidades manuales porque mi madre o
mi padre me dijeron que no era habilidoso, probablemente me
haya convertido en profesor de habilidades manuales tratando
que mis padres me aceptaran y me quisieran durante un gran
espacio de mi vida, a través de las habilidades manuales, y tratando
una y otra vez con malas experiencias hacer que nos quieran.
Esto no es posible. Lo único que podemos hacer es quererlos,
lo demás no está en nuestro control. Que tomemos o soltemos
este mandato, sí depende de nosotros, y nos da la libertad
de elegir. Hacer muchas cosas más, qué habilidades descubriremos.
Todo lo que queremos a través de la experiencia, pero,
¿cómo...?
Habitando profundamente el momento presente.
Haciéndonos responsable de quiénes somos en verdad, un
ser maravilloso.
Un ser que ama, que está hecho de amor.
Haciendo muchas reuniones de consorcio internas. Cada vez
que lo necesite, para consolar y confortar a quienes forman parte
de su consorcio interno. Haciendo profundo silencio, tomando
las manos de quienes forman este consorcio y pidiendo deseos,
los que nos llevan a la felicidad, al bien común de mis partes.
Pidiendo ayuda cuando no sabemos qué desear.
Habitando el presente, haciendo una pausa cuando nos damos
cuenta que no lo estamos haciendo para intentar una y otra
vez volver al presente, observando lo poco común que tiene lo
común, y lo común que tiene lo poco común. Sorprendiéndonos
de las distintas vistas que tiene una misma cosa. Con los ojos
del alma, mirar a nuestro alrededor y descubrirnos renovados y
libres de prejuicios, sin comparaciones absurdas ni reclamos,
sino con aceptación y disposición al cambio. Sin obstáculos, ni
necesidad de probarnos continuamente. Delante, el camino está
hecho por si mismo y elegimos qué es lo que hay y cuántas
dificultades afrontar, y sólo nos detenemos cuando queremos
preguntarnos ¿Para qué?
Para habitar el silencio y el espacio, de nada sirven la vergüenza,
ni el miedo, ambos detienen la evolución.
El exceso de humildad es la modestia y el defecto, el orgullo.
Los dos distorsionan.
Que nos acerquemos cada día a ser un poco más humildes.
En el espacio todo es mío, todo lo que intuyo, pienso, siento
y hago es mío. Si me mantengo en él, no puede ser de otro, no
puedo lastimar, ni ser lastimado.
Dentro nuestro, hay un espacio, una sabiduría superior. Ese
espacio, esa sabiduría superior, es el lugar donde habita la confianza
y sólo la aventura del propio descubrimiento nos lleva a
pasear para volver a nosotros cada vez que lo deseamos. Ese lugar,
íntimo, sagrado y secreto donde sólo hay deseos, donde
nos sentimos plenos, felices, completos y amados.
La felicidad, la plenitud, la paz, nuestra visión de paraíso es
un lugar absolutamente accesible, pues sólo tengo que observar
a la esencia del ser, que tengo dentro. Es absolutamente
placentero. En ese espacio siento confianza, todo se vuelve coherente,
todo da respuestas. Es el lugar donde sentirse a sí mismo
haciéndose preguntas y respondiéndose, haciéndose responsable
de sí mismo y todo lo que lo rodea. Ese lugar es el lugar
del gozo, en donde es imposible estar solo. Allí formamos la
red más hermosa, más perfecta y nos ponemos en contacto con
nuestro ser REAL. Nuestra condición de REALEZA.
Habitamos haciendo realidad nuestros deseos, sin condiciones
porque en este lugar, el tiempo no existe, en los términos
de linealidad en el que lo conocemos. Hay tiempo para todo, la
vida es eterna no permanente y fluye como un manantial sin fin
que se alimenta de lo mejor de nosotros y por lo tanto refleja en
el afuera lo mejor. En este lugar no hay vencimientos, ni obligaciones,
sólo responsabilidades de gozo continuo, el hacer a favor
de la esencia se vuelve natural, sin plazos. Lo que pedimos
ya se hizo realidad antes de que lo deseemos, y parece mágico.
No hay más necesidades que resolver, sólo el placer de disfrutar
lo que deseo.
Este es el tiempo del no-tiempo, donde todo es posible, y se
hace posible para armónicamente sin intervención sólo a través
del deseo.
El ¨trabajo¨es sólo desear y ver la realidad en este nuevo espejo
de descubrimiento continuo. No hay desconfianza posible,
todo es maravilla y se refleja en el espejo de la realidad de la vida
con amor e inocencia.
El juicio y el prejuicio quedaron atrás, somos únicos y desde
la visión, el paraíso se ha vuelto pacífico. Dejó de ser hostil para
transformarse en un espacio donde puedo elegir libremente ser.
¡YO CONFÍO!
viernes, 11 de noviembre de 2011
CONFIANZA 4
La verdad es que la carencia no hace otra cosa que atraer más
carencia.
La magia está en que sólo pueden cambiar con las herramientas
que les proporciona el lado que más les satisface. No se puede
cambiar para bien sin las herramientas que son las virtudes
puestas en práctica, en beneficio propio, porque el secreto no es
cambiar las medidas de las porciones, sino cambiar la torta.
Ese es el campo de probabilidades, si agrandamos la torta
las porciones se agrandan. Podemos cortar porciones distintas,
podemos hacer que el campo de probabilidades sea diferente.
Aumentan las posibilidades de éxito.
El campo de probabilidades diferente es el que pone en funcionamiento
los potenciales y reside en nuestro inconsciente.
No es de fácil acceso por medio del raciocinio, hay que utilizar
métodos poco comunes para acceder. Las puertas están
dentro de un campo misterioso, y este campo misterioso sólo
deja de serlo cuando ponemos nuestra confianza en funcionamiento,
es decir, nuestra fe en nuestras habilidades.
Para dar otro ejemplo prestado: “puedes estar en control de
tu cuerpo, de cómo tomas la pelota, pero después de soltarla, el
resultado no depende en absoluto de ti”.
La parte que no depende de uno, es la que depende de la resonancia
armónica y aquí es donde la fe y la confianza juegan su
rol. El resultado comienza con una serie de factores controlables
por uno mismo, pero el logro no depende de uno en absoluto. De
hecho, lo único que podemos hacer para favorecer el resultado
es esperar lo mejor, aceptando que el logro más allá del resultado,
se habrá cumplido, pues habremos aprendido algo.
El logro está más allá del resultado.
El logro es el APRENDIZAJE.
Para que haya confianza debe haber valentía, debemos conocer
nuestro valor y este debe moverse en el plano de la flexibilidad,
sin juicio, ni preconcepto, con inocencia y en libertad. Completamente
enamorados de nosotros, sin esperar nada del afuera.
Sólo con atención en lo mejor de nosotros mismos. En completa
renuncia al reconocimiento de los demás y con completa
aceptación del propio reconocimiento. Sin recompensa, sabiendo
que la compensación vendrá a su debido tiempo y forma.
Sé que lo que estoy escribiendo suena ideal y les aseguro
que sé lo difícil que es encarnar esta sensación.
Este es el preámbulo para sugerirles entonces la meditación,
el Reiki, el yoga, cualquier línea de técnicas o ejercicios, la que
les resulte más conveniente para dejar de resistir lo mejor.
Más sugerencias:
• Los baños de inmersión o las duchas largas, sirven para
aflojarse. No lo dude, aproveche los beneficios del contacto con
el agua.
• El silencio y la observación de la Naturaleza, sirven. Salga
a dar un paseo.
Encuentre la paz, entréguese y haga un pacto consigo mismo,
con algo que le produzca profundo placer. Si se le hace difícil,
tranquilícese, ya pasará y NO HAGA. Porque probablemente lo
que haga con esfuerzo no dará resultados.
Reconcíliese con Ud. mismo, haga una tregua hasta encontrarse
en paz. Y trátese con paciencia amorosa.
Porque la confianza tiene que ver con la liberación de nuestro
propio y cruel juicio para con nosotros mismos.
Para dejar de ponerse en juicio continuo nadando en el pasado…
No juzgue a los demás, ni a ninguna situación. Empiece por
ahí. En vez de sentarse con sus amigas a criticar a otras, empiece
por hablarse a Ud. de lo que le pasa y lo que le gusta.
Suéltese de las amarras de la aprobación externa y del reconocimiento
externo. Súmese a la aprobación interna y el reconocimiento
interno. Conózcase a Ud. mismo a través de los demás,
SIN JUICIOS.
El otro no es tan malo como Ud. piensa, Ud. tampoco es tan
malo como piensa. Ud. no es tan bueno como cree, el otro tampoco
es tan bueno como Ud. cree.
Todos los que caminamos en esta vida somos más o menos
iguales y anhelamos más o menos lo mismo:
NUESTRO PARAÍSO HECHO REALIDAD.
Liberarse es responderse a estas preguntas básicas de nuestra
fuente más profunda, es hundirse con valentía en lo más
profundo de la pileta del presente.
• ¿Quién soy?
Cuando cumplo las promesas que me hago a mi mismo,
no necesito ni el juicio, ni la aprobación de nadie.
Somos luz del Universo actuando mediante un cuerpo humano.
Un universo inmerso en otros universos que interactúan entre
sí, a través de diferentes dimensiones.
• ¿De donde vengo?
De la Fuente que no nació, ni morirá, y a la que vuelvo eternamente.
• ¿Para qué estoy aquí?
Para crear paraíso en mí presente.
La confianza tiene un truco, nada la hace permanente, debe
reforzarse una y otra vez. No existiría evolución si así lo fuera.
En cambio es eterna, no tiene principio, ni fin. La Fe existe
más allá de mí, dentro mío, alrededor mío y es infinita. La única
persona o situación que la limita soy yo mismo, por lo que la
percepción y la observación de la realidad se vuelven imprescindibles
a la hora de encarnar la Fe
Suscribirse a:
Entradas (Atom)